El ayuntamiento se apropia un jardín privado junto a la kultur etxea

Una nueva cacicada en Getxo. Así lo califica la plataforma de vecinos por un Romo sostenible, y la coordinadora de asociaciones Auzokideok. El Ayuntamiento ordenó el martes 8 de agosto invadir el jardín de la comunidad adyacente a la kultur etxea y talar sus árboles. El objetivo era crear un espacio de salida de la kultur etxea. Es el resultado de un edificio fuera de proporción. Necesita ahora el ayuntamiento, de tan obeso que es el edificio, ocupar espacio de las comunidades adyacentes para crear una zona de evacuación. Vecinas y vecinos de la zona demuestran que los mismos planos de la obra catalogan su jardín como privado. Las escrituras de quienes viven en el edificio certifican que ese jardín es del edificio desde hace más de 50 años. Pero es que Catastro certifica que desde hace 46 años, quienes viven en ese edificio vienen pagando a la hacienda vizcaína y al ayuntamiento por esos metros de jardín. Hasta ese momento, como muestra la fotografía de arriba, la valla delimitaba la propiedad de ambas parcelas.

Cuando los operarios de Bycam, la empresa que está levantando la piramdal kultur etxea, procedieron a la tala de los árboles, los vecinos procedieron a poner una denuncia en el juzgado por allanamiento de propiedad privada. Ahora el ayuntamiento aduce que el jardin es suyo. ¿Por qué? Emitió no un informe, sino"un dosier" interno y lo distribuyó entres algunos vecinos. La gran mayoría de propietarios desconoce tan bizarra comunicación. A tenor de las operaciones cometidas por el ayuntamiento en otros tiempos y en otros barrios, es posible que se reuniera con algún presidente o administrador de fincas de alguna comunidad, como ha dejado caer algún técnico del ayuntamiento. Tras la entrega del "dosier", y al no haber contestación de las personas propietarias, el ayuntamiento entiende esto como: un proceso participativo; un acuerdo; aún más: un traspaso de poderes. El jardín que han mantenido 50 años unos vecinos y tributado, pasa a manos del ayutamiento por arte de decreto con el noble objetivo hacerlo desaparecer.

El ayuntamiento, o este jocoso equipo de gobierno desde hace 15 años, viene a decir lo mismo: Me quedo parte de una finca que  he cobrado debidamente, y después de notificarlo con informes que he hecho redactar "internamente", niego incluso el derecho a la réplica, puesto que en su momento quienes eran afectados no reclamaron nada. Nepotismo lustroso. Esto no se puede permitir de ninguna manera.